Arquimesa tipo papelera

Esta pieza de estilo imperio estaba originariamente colocada en la sala pequeña de la casa de la escritora en la calle Goya de Madrid. En su interior contiene doce cajones, en origen individuales, ya que están numerados uno a uno. La estructura de las gavetas contaba con divisiones interiores, seguramente para guardar colecciones de piezas pequeñas, aunque también sufrió modificaciones, posiblemente para atender la necesidad de guardar otro tipo de objetos. Tal vez  haya sido este uno de los contadores donde Emilia Pardo Bazán guardaba sus manuscritos, razón por la que el mueble se sitúa en la sala que recrea el gabinete de trabajo de la escritora.

La cubierta de la tapa tiene una pieza de bronce en el centro, de forma trapezoidal, con el relieve de una mujer alada vestida a la manera clásica. Está sentada y escribe con un punzón mientras sostiene con la mano izquierda una corona de laurel -inmortalidad y gloria para héroes y sabios-­ y tiene la trompeta de la fama a sus pies, aquella que cantaba las verdades y las mentiras. Es Calíope, musa de la elocuencia y de la poesía épica, la misma que Fulgencio, en el libro primero de Mitología, describe como la más distinguida de las nueve hermanas, la que significa el último complemento de la ciencia, perfección de las obras de los estudiosos y aplauso merecido de sus tareas.

Tal vez Emilia Pardo Bazán a través de sus lecturas infantiles haya conocido a  las musas, las cuales se convertirían en un referente bien visible en su universo vital y literario. Precisamente, estas nueve hijas de Zeus son las que sujetan el llamado “balcón de las musas” que adorna una de las torres de Meirás, donde la escritora tenía su estudio y su biblioteca.